... No te ha pasado que quieres dejar toda tu vida e irte a un lugar remoto a estar SOLO?, ¿a veces te sientes que perdiste el camino y tu vida solo es una secuencia sin sentido de días uno igual al anterior?, ¿has deseado ir a un lugar específico y no vas porque siempre encuentras excusas perfectas?, tal vez es tiempo que dejes respirar tu esencia, dejes las excusas a un lado y te lances a esa aventura, y lo digo con la responsabilidad de quien ya lo hizo.
Lo pueden llamar crisis de los 30 o de los 40, muchos dirán que es una locura o que no tienes criterio, pero en realidad si el mísmisimo capitán del barco no sabe en que puerto atracar o qué dirección tomar, ¡hay un problema muy grave! y eso creo que nos pasa a todos en algún momento de nuestra vida.
Los viajes iniciaticos, se definen como una experiencia, en la que un individuo se encuentra en situaciones hostiles o adversas que harán que su personalidad cambie, después de que toma conciencia de sí mismo, de la realidad externa o de poseer una misión en la vida, y ve modificado su carácter, espíritu o experiencia para lograr una mejora en su persona, después de lograr superar una serie de situaciones difíciles.
Como ven los viajes no sólo son físicos, son un cúmulo de experiencias... pero si a esto le agregas el salirte de tu zona de confort y llegar a un lugar que sólo en sueños te hubieras imaginado allí, la experiencia crece, te envuelve y cambia toda tu vida.
Cuando viajas sólo con esto en mente, pasan muchas cosas. En primer lugar, sientes una especie de autosaboteo que te acompaña los primeros dos días, es una suerte de "conciencia colectiva" que te habla y te reprocha tu "egoismo"... pero a la vez esto actúa como un catalizador para que tu propia esencia se haga sentir en ese monólogo interior y reclame su espacio. Es posible que los primeros dos días te sientas algo culpable, pero al llegar al destino físico se te quita.
Después del tercer día, hay una voz conocida que extrañabas, que empieza a "repasar" toda tu vida, te marca las enseñanzas, las equivocaciones, incluso sientes muchas ganas de pedir perdón a tí mismo y a los demás... es una sensación de "autoevaluación" pero sin sentirte juzgado... es como repasar todo lo que has vivido hasta ahora, cómo has actuado y qué has logrado...
Al quinto día, ya el monólogo se convierte en un diálogo extraño, si tu viaje incluye hacer una caminata, una peregrinación, subir una montaña o meditar en silencio, puede que apenas te des cuenta... es algo asi como que tu ser conversa con la esencia universal... como lo describe Neale Donald Walsh en su saga "Conversaciones con Dios", tu ser hace las preguntas y una maravillosa sabiduria las contesta, en este momento sientes una profunda necesidad de escribir, empiezas a mirar tu entorno con otros ojos y te das cuenta que todos los días pasan cosas maravillosas en tu vida... lo que pasa es que no nos damos cuenta porque siempre estamos "muy ocupados".
La sensación de libertad y de genuino poder sobre tu vida que te da el vivir una experiencia como esta, es algo que no se puede describir con palabras: estar en ese lugar, que después de esa experiencia se convierte en sagrado para tí y ver tu vida en perspectiva y desentrañar los deseos de tu alma y también tus miedos, es una experiencia maravillosa que vuelves a vivir cada vez que lo recuerdas... hacer un viaje como estos es como volver a nacer, con la ventaja de que lo haces con una "guía" de aprendizajes pasados y un mapa de lo que quieres para tu vida.
Las fotos son de mi viaje... espero que te inspiren a hacer el tuyo! Buen Camino
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